Una fuente natural de vitaminas, yodo y antioxidantes, muy recomendable para nuestra dieta.
Seguro que, además de todas las veces que os lo hemos contado por aquí, habéis escuchado en muchas ocasiones lo beneficioso que es tener una dieta variada. En este tipo de dieta caben todo tipo de conservas y alimentos frescos de origen vegetal y animal, tanto para darle variedad como para obtener todos los nutrientes que necesitamos. Las verduras deben estar muy presentes, y una de las que nos puede ayudar mucho es la espinaca. Tiene muchos elementos vitales para nuestra salud. Y también algunos mitos asociados que os vamos a desmentir. ¿Queréis saber un poco más sobre ellas? Os contamos.
La espinaca es una verdura de hoja verde llena de beneficios para nuestra salud, y esto lo conocían nuestros ancestros hace siglos. Se comenzó a cultivar en lo que hoy es Irán y los árabes la trajeron a España más o menos en el siglo XI. La Spinacia oleracea es una planta de cultivo anual que en España está en temporada desde la primavera. Pero, si la consumimos en conserva, podemos disfrutar de todas sus propiedades durante todo el año.
Su tallo puede alcanzar hasta el metro de altura y sus flores masculinas y femeninas contienen hasta 115 semillas, aunque nosotros solo disfrutamos de sus hojas. Tiene una composición nutricional muy interesante para nuestra dieta, para empezar porque es una verdura con muchísima agua. Es un potente antioxidante natural con activos que previenen el daño oxidativo y contiene unos 28 microgramos de Vitamina C por cada 100g, un porcentaje muy alto de la que necesitamos tomar cada día.
Podemos ver en su color verde que es una buena fuente provitamina A, y también de ácido fólico, buenos nutrientes para mantener nuestra piel y cabello en buen estado. Contiene 30mg de calcio para nuestra salud ósea y 24mg de magnesio, beneficioso para nuestra salud cardiovascular, para el mantenimiento del sistema nervioso y también del inmunológico.
También son una de las fuentes vegetales con más niveles de potasio, incluso más que el plátano, que siempre ha tenido más fama. Contiene unos 168mg. También son una muy buena fuente de fibra para mantener un buen tránsito intestinal y funcionan muy bien como bloqueadores del efecto del sodio, para quienes deben reducir el nivel de sal en sus menús. Eso sí, se os va a caer un mito. Las espinacas no son esa super fuente de hierro que nos prometió Popeye. Contienen unos 0,80g por cada 100, que no está mal, pero hay otras fuentes de hierro más interesantes en otros alimentos.
Eso sí, lo que sí os podemos decir es que, además de ser una verdura super completa, también es una de las más versátiles. Tiene un sabor muy suave que las hace combinar con cualquier cosa, tanto en su versión fresca como en conserva. Con pescados y legumbres, salteadas, en crema, en salsas, pizzas, ensaladas, tostas… Quedan bien casi en cualquier receta. Os recomendamos tenerlas siempre en casa y consumirlas todas las semanas, por todas sus propiedades y porque están buenísimas con todo. ¿Cómo soléis tomarlas en casa?
